Después de las copiosas precipitaciones de hace unos días la sensación puede ser que sobran ya recursos para todo el año en la cuenca del Segura, pero desgraciadamente no es así.
Todavía el almacenamiento en los embalses está muy por debajo de la media en estas fechas de la última década, si bien todavía parte del efecto de las lluvias se irá notando en las próximas semanas como descargas de los acuíferos al río.